El “frosting” en las velas, es el crecimiento de pequeños cristales en la superficie de la cera. Afortunadamente es únicamente un problema estético y no afecta la forma en que se quema o huele la vela. De hecho, es un proceso natural que, eventualmente ocurrirá en nuestras velas.
Algunos consejos para atrasar su aparición son:
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Agita lentamente la cera al fundirla. La agitación excesiva de la cera de soya derretida puede aumentar y/o acelerar el proceso de cristalización, lo que produce la apariencia blanquecina
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Precalienta tu cristalería. Puedes precalentar fácilmente la cristalería en un horno tibio a baja temperatura o con una pistola de calor. Calienta a 60-70°C y manipula los recipientes calientes con cuidado.
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Para cera de soya se recomienda calentar a 80 – 90°C°, vierte la cera fundida a la temperatura correcta. C. Verter a una temperatura inadecuada favorece la formación de cristales en la superficie.
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Deja que las velas se enfríen a aproximadamente 65-70°C. Asegúrate de que las velas se enfríen a temperatura ambiente y en un espacio libre de corrientes de aire. Colocar las velas en una rejilla de enfriamiento de alambre también puede ayudar a que la vela se enfríe uniformemente y evita la transferencia de calor adicional que puede ocurrir si las velas se enfrían sobre un mostrador o una mesa sólida.
